Marzo es el Mes de la Prevención del Fraude, y Canadá está intensificando sus esfuerzos para combatir el fraude de inmigración que afecta a miles de solicitantes cada año. El Honorable Marc Miller, Ministro de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía, advierte que los estafadores se aprovechan de los aspirantes a nuevos residentes, cobrando altas tarifas por servicios falsos, vendiendo documentos fraudulentos y difundiendo información errónea. Estas estafas no solo perjudican a las personas, sino que también amenazan la integridad del sistema de inmigración de Canadá.
Casos Reales: Cómo Ocurre el Fraude de Inmigración
Muchas personas no se dan cuenta de que han sido estafadas hasta que es demasiado tarde. Estas son algunas maneras reales en que el fraude ha afectado a los solicitantes:
- La Trampa de la Oferta de Trabajo Falsa – Un trabajador calificado solicitó el Entrada Expreso pero estaba luchando por mejorar su puntuación. Un «consultor de inmigración» prometió asegurarle una oferta de trabajo con un LMIA, por una tarifa de $20,000. Después de pagar, el trabajador recibió una carta de oferta falsa de una empresa que no existía. Su solicitud fue marcada por fraude, lo que provocó una prohibición de cinco años en Canadá.
- La Estafa de la Visa de Estudiante – Una joven de Asia meridional pagó a un agente para que manejara su solicitud a una universidad canadiense. Recibió un permiso de estudio y se mudó a Canadá, solo para descubrir que su carta de aceptación era falsa. Los oficiales de inmigración investigaron y se le ordenó abandonar el país inmediatamente.
- Abogados de Inmigración Falsos – Una familia que esperaba inmigrar bajo un programa de nominación provincial pagó a un supuesto «abogado» miles de dólares. La persona no tenía licencia y desapareció después de presentar solicitudes incompletas. La familia perdió su dinero y perdió la oportunidad de solicitar.
Estos son solo algunos ejemplos de los miles de casos de fraude que ocurren cada año. Solo en 2024, Canadá investigó un promedio de 9,000 casos sospechosos de fraude por mes, lo que llevó a:
- Miles de rechazos de solicitudes cada mes
- Decenas de miles de actores de mala fe prohibidos en Canadá
- Nuevas sanciones de hasta $1.5 millones para representantes de inmigración deshonestos
Áreas Clave de Fraude y Cómo Canadá Está Contraatacando
Para proteger el sistema, IRCC está tomando medidas en varias áreas:
- Ofertas de Trabajo Falsas y Ventas de LMIA – IRCC ha eliminado el incentivo para comprar o vender LMIAs, asegurando que solo las ofertas de trabajo genuinas contribuyan a la elegibilidad para la inmigración. Este cambio apunta a los estafadores que explotan a los solicitantes desesperados.
- Información Falsa sobre Permisos de Estudio – El gobierno está luchando contra los agentes engañosos que garantizan falsamente los permisos de estudio. Se insta a los solicitantes a verificar las cartas de aceptación de la universidad y a utilizar solo fuentes confiables.
- Servicios de Inmigración Fraudulentos – Muchos estafadores se hacen pasar por consultores con licencia, pero carecen de las credenciales para asesorar legalmente a los solicitantes. El gobierno está aumentando la conciencia pública y tomando medidas contra los representantes no autorizados.
Protéjase: Cómo Evitar el Fraude de Inmigración
El Ministro Miller insta a los solicitantes a ser cautelosos y seguir estas pautas para mantenerse seguros:
- Utilice solo profesionales con licencia – Solo los consultores de inmigración, abogados o notarios autorizados pueden cobrar legalmente por servicios de inmigración. Sus credenciales se pueden verificar en los sitios web oficiales de regulación.
- No pague por ofertas de trabajo falsas – Los empleadores legítimos no piden a los trabajadores que paguen por ofertas de trabajo o LMIAs.
- Utilice recursos oficiales gratuitos – Todos los formularios y guías de inmigración están disponibles de forma gratuita en el sitio web oficial de IRCC.
- Denuncie actividades sospechosas – Si sospecha de un fraude, denúncielo a IRCC o al Centro Canadiense Antifraude.
El fraude puede llevar a solicitudes prohibidas, deportación o incluso cargos criminales. Al mantenerse informados, los solicitantes pueden protegerse a sí mismos y su futuro en Canadá.